Cuando me sentía amenazado, me portaba arrogante; cuando sentía que querías imponerme algo, mi arrogancia se hacia presente; las veces que jactaba de tal o cual cosa, fueron por miedo a que no reconocieras en mi tal o cual cualidad; las veces que sabia que te equivocabas y yo ostentaba la verdad, mi arrogancia entraba a escena... en fin, ejemplos tengo muchos, ya que si somos sinceros, fui una persona muy arrogante, y aunque en contadas ocasiones y bajo ciertos contextos esta postura es buena, hoy día no podría diferenciar cuando lo fue y cuando no.
Mi mas sincera disculpa por las arrogancias que me llevaron al orgullo, a la intransigencia, a tu desazón, sentía miedo... estaba inseguro.
2 comentarios:
La vida tiende naturalmente a perfeccionarse. Qué bueno que estés de regreso :D
Es una de esas cualidades de una persona....que le priva de vivir muchísimas cosas....La arrogancia no lleva a nada.
Besos y buenos días
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